Cinco años después del inicio de su comercialización, Volkswagen acaba de introducir una puesta al día del Eos. Se trata de un 'restyling' muy esperado porque el Eos era uno de los pocos modelos junto con el Tiguan y el Passat CC que todavía no contaba con ese diseño unificado que Volkswagen ha imprimido a todos sus modelos.
¿Cómo es? En Marcha ¿Cómo es?Esta puesta al día servirá, además, para dar un nuevo impulso a la comercialización de este cabrio. Y es que a pesar de que Volkswagen lo ha intentando con el Esos, éste no ha tenido el tirón comercial esperado.
Así, en España, por ejemplo, en los dos últimos años y medio, la firma alemana sólo ha comercializado cerca de 1.900 unidades de este modelo, lo que representa el 3% del total de las ventas del Golf en este tiempo -63.400 unidades-. Estos bajos resultados, unidos a la inminente comercialización del Volkswagen Golf Cabrio -con un sistema de techo completamente diferente- han alimentado los rumores que apuntan a que el Eos no tendrá sustituto una vez que acabe su vida comercial, en torno a 2014.
No obstante y dejando las especulaciones de lado, esta puesta al día que llega al Eos es un restyling bastante profundo. Desde el punto de vista del diseño, recibe un frontal completamente renovado en el que destacan las líneas horizontales de la parrilla, los nuevos grupos ópticos y las modificaciones del faldón. Asimismo, los espejos también han sido modificados y lo mismo ocurre con los grupos ópticos traseros.
Respecto al interior, este Eos estrena volante, nuevos relojes en el cuadro de instrumentos, una pantalla de ordenador con mayores dimensiones y en color y nuevos mandos en el climatizador. A todo ello se suman unos motores más eficientes y ahorradores.
En definitiva, el Eos estrena nuevas razones para luchar de tú a tú contra sus principales rivales de la categoría. Hablamos entre otros del Renault Mégane CC y Peugeot 308 CC. Dejamos a un lado las versiones descapotables del Ford Focus y del Opel Astra porque las últimas generaciones de estos modelos todavía no están a la venta.
Respecto a ellos el Eos cuenta con una imagen de marca más cuidada. Como contrapartida, también es entre 3.000 y 4.000 euros más caro que sus rivales franceses.
En MarchaRespecto al modelo de 2006, este nuevo Eos presenta, sobre todo, diferencias estéticas. Entre las novedades que incorpora destacan el nuevo frontal con una parrilla más lineal y unos grupos ópticos de diferente diseño. Del interior, nos quedamos con el cuadro de instrumentos, volante y climatizador, todos ellos convenientemente renovados.
Entre los puntos fuertes del Eos, destaca especialmente el sistema que cierra o abre el techo en 30 segundos. No sólo presenta una sobresaliente terminación, sino que además logra una buena insonorización en el habitáculo y un buen confort de viaje.
Por el contrario, si lo retiramos y circulamos sin techo, se aprecian algunas turbulencias que hacen que echemos en falta un deflector.
En cuanto al habitáculo, que no presenta variación alguna, es uno de los aspectos más criticables del vehículo. La anchura de las plazas traseras es muy justa y es fácil que los ocupantes de la segunda fila rocen con sus cabezas en el techo.
A ello se suma un maletero que queda bastante limitado. De hecho, no se pueden depositar objetos ni en la parte superior ni en los laterales. Al menos bajo el piso del mismo aparece una rueda de emergencia, que siempre es de agradecer.
La versión probada es el motor 1.4 TSI de 160 caballos. Esta mecánica hace que el Eos sea un vehículo ágil, con unas buenas prestaciones y, al mismo tiempo, bastante confortable. Y es que este motor no sólo destaca por su buena respuesta entre las 2.500 y las 6.000 vueltas, sino que también sobresale por ser bastante silencioso. No ocurre lo mismo con el consumo de combustible, que con 8,5 litros de media, peca de ser algo elevado.
Por último, no se echa en falta nada importante en el apartado de equipamiento, lo que se traduce en un precio bastante elevado.
ConclusiónEl Volkswagen Eos es un modelo recomendable sólo para todos aquellos que busquen un descapotable con un techo duro que aísle bien el habitáculo, no necesiten las plazas traseras salvo para una urgencia y estén dispuestos a pagar entre 3.000 y 4.000 euros más que lo que cuestan los rivales franceses. Y si por si fuera poco, a ello hay que sumar la posible canibalización que tendrá este cabrio cuando Volkswagen inicie la comercialización del Golf Cabrio.