Pues sí, compañeros, es lo que hay.
En previsión de un siniestro serio (no 3 cerraduras, 1 caja de fusibles y 2 aletas abolladas), decides pagar 450 € por un seguro a todo riesgo por un coche que calculas puede valer 1500 €, cuando según sus cálculos vale finalmente 750 €. ¡Menudo negocio!, 450 para asegurar 750.
Aunque casi es peor si contratas un seguro a terceros: te ahorras, como máximo, 100 € y en caso de 'leve' accidente donde no haya terceros culpables y cuya reparación supere su valor venal, visto lo visto, te lo dan siniestro sin recibir nada a cambio. Por no hablar de que, pese a que haya terceros culpables, seguro que tampoco te lo arreglan y te indemnizan con una cantidad irrisoria. ¿Por qué?. Por que ya se encargan las compañías de compensar sus ¿perdidas? a costa del asegurado, para ahorrarse entre ellas costos tu propia compañía te 'vende' ante la contraria, no reclamando la reparación que necesitas y aceptando los pocos euros en los que te valoren el coche. Lo dicho: negocio redondo.
Sea como sea, ahora toca esperar a que la aseguradora contacte conmigo y pueda exponerles que, pese a considero me están timando legalmente, renunciaría voluntariamente a determinadas reparaciones de chapa con el fin de que se reduzca el precio de la reparación y pueda así al menos tener el coche listo para circular. O que recalculen e indiquen hasta qué importe pueden ellos hacerse cargo y abonar yo la diferencia en aquellos trabajos que considere estrictamente necesarios. Entiéndase que las 2 aletas no las repararía porque ¿de qué sirve tener un coche impecable estéticamente si únicamente te lo valora aquel que espera robártelo?.
Saludos.