Pese a que entre el 15 y el 20% de los radares de la DGT están fuera de uso, existen algunos cinemómetros más recaudadores que otros. Te ofrecemos la lista de los radares que más multan en España.
En esta lista de los radares que más multan en España puedes ver que Castilla-La Mancha y Madrid son dos de los lugares 'más castigados' por los cinemómetros.
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Al margen de estos, la DGT cuenta con un presupuesto en el que la única partida de libre disposición (15 millones de euros) se va a utilizar para reparar algunos de los numerosos controles de velocidad que actualmente no funcionan (entre el 15 y el 20%).
Desde 2010, las cuentas de Tráfico se han visto reducidas gradualmente, lo que ha tenido una incidencia directa en el estado de conservación de una de sus herramientas principales: los radares.
Por ley, cada cinemómetro debe revisarse anualmente por el Instituto Español de Metrología. Una operación cuyo coste asciende a 500 euros la unidad y que también debe hacerse si el radar es modificado o reparado tras estropearse solo o por un acto vandálico. En este caso, la factura completa puede estar más cercana al coste de un dispositivo nuevo, que son varias decenas de miles de euros.
Como en otras actividades de la Administración, hace tiempo que los plazos para renovar contratos con empresas de servicio se vienen alargando mucho más de la cuenta. Tras ser consultada por AUTO BILD, la DGT no ofrece cifras concretas a este respecto, pues “Cada día se estropean o paran unos radares y se arreglan otros, es un dato que no tenemos tan actualizado”.
Sin embargo, ya se han producido algunos casos de actuaciones sospechosas de mala práctica por parte de empresas concesionarias. Incluso, puede haber bastantes controles de velocidad sancionando sin haber sido verificados convenientemente, como procede.
Así, siempre conviene recordar dónde están ubicados los equipos que más sancionan -véase la tabla inferior de radares que más multan de España-, una lista elaborada por AEA con los datos de sus socios y en la que se incluyen los de la DGT, el Servei Català de Trànsit y el Gobierno Vasco.
¿Menos educación?
Aunque, quizá, cuando leas esto alguno ya no esté operativo. En cualquier caso, la bajada del número de sanciones por velocidad no es nueva. Desde 2010, las cuentas de la DGT se han visto reducidas gradualmente. Primero, a 951 millones de euros ese año, para pasar, en 2011, a 883 millones.
Este año, la cifra que es de 859 millones de euros, aproximadamente y como siempre, se corresponden con la cantidad que Tráfico prevé recaudar entre sanciones y tasas. Sin embargo, una partida se entrega otros ministerios “por solidaridad”. Así,en 2012, habrá 136 millones de euros que irán a gastos no relacionados con la Seguridad Vial, como obliga la ley, algo que varias asociaciones llevan años denunciando.
Así, el presupuesto real de la DGT se queda en 724 millones, a los que hay que restar el dinero para los salarios de funcionarios, guardias civiles y contratos “heredados de la anterior administración”. En resumen, solo quedan 15 millones para educación vial, mantener radares...
¿Es posible una reubicación general?
Ya sabes dónde están los radares que más multan de España, pero ¿es posible su reubicación en puntos más conflictivos? Al respecto, la máxima responsable de Tráfico se ha vuelto a pronunciar sobre su intención de colocar los puntos de control de velocidad “allí donde son más necesarios”. ¿Significa esto que alguno de los 591 radares fijos que gestiona esta institución se van a reubicar en los tramos con elevada concentración de accidentes?
AUTO BILD se ha puesto en contacto con la DGT, que no se ha querido pronunciar al respecto, pero a tenor de las cifras mostradas por el organismo del Ministerio del Interior se diría que, a corto y medio plazo, difícilmente. Hay que tener en cuenta que cambiar de ubicación un cinemómetro, si se hace únicamente con el criterio de ponerlo donde hay más siniestros, puede tener un coste superior al del propio aparato, puesto que puede requerir de obra civil.
Fuente: AutoBild.es.
No es que sea gran cosa pero, como se puede apreciar, ha levantado un poco la pintura. 
La única suerte es que, en el sitio donde está, solo se vé durante la maniobra porque desapotado está en el maletero y capotado lo tapa el embellecedor cromado. 
¿Os ha pasado algo parecído a alguno?.
Salu2
