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La Comisión Nacional española de la Competencia (CNC) ha anunciado la apertura de dos expedientes sancionadores contra varias petroleras, entre las que se encuentran Repsol y Cepsa. El motivo de la sanción viene de un presunto pacto de los precios de los combustibles.
La Comisión Nacional de la Competencia (CNC) ha abierto dos expedientes sancionadores contra las petroleras Repsol, Cepsa, Disa, Meroil y Galp por pactar precios. Esta sanción llega tan solo un día después del comunicado de la CNC, que informó que se estaban investigando varias empresas del sector del automóvil por prácticas anticompetitivas, entre ellas la fijación de precios.
Tras haber investigado desde mayo el comportamiento y las sedes de estas petroleras, la Comisión "ha puesto de manifiesto en sucesivos informes la falta de competencia en el sector de los combustibles de automoción en España, tras constatar incrementos significativos en el precio de los carburantes".
El primer expediente sancionador está dirigido contra Repsol, Cepsa, Disa, Meroil y Galp por posibles conductas bilaterales anticompetitivas, que consistían en la coordinación en materia de precios, clientes y condiciones comerciales, así como en el intercambio de información comercial sensible. El segundo estudia si Repsol y Cepsa coordinaron precios con los empresarios independientes que operan en sus respectivas redes de distribución.
Además de la investigación llevada a cabo por la CNC, la Comisión Nacional de la Energía (CNE) también ha apuntado que ha observado un "alineamiento de los precios de venta al público de los combustibles de automoción", así como el conocido como "efecto lunes", que consiste en una bajada de precios de los combustibles ese día de la semana, que coincide con el día en el que se informa a la UE sobre el precio de los combustibles en España.
Por otro lado, el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, ha indicado que el margen de beneficios que obtienen las petroleras en España es el mayor de Europa. Esto, según el ministro, es debido a la poca competencia que existe en el sector dentro de España. Además, el precio de los combustibles antes de impuestos en España, es uno de los más altos de Europa. El Gobierno está buscando rebajar el margen comercial de las petroleras y aumentar la competencia para que los precios del combustible no sigan disparándose como hasta la fecha.
