Esta es la primera ruta que os voy a compartir. es una ruta llena de historia, que transcurre a lo largo de lo que antes fue una calzada romana (actualmente tiene el tramo mejor conservado de España), lugar de transhumancia. El puerto del pico, pasaje natural que comunica la provincia de Toledo, desde la comarca de la campana de Oropesa, con la provincia de Avila. Es una ruta que me conozco bastante bien, por lo que podré daros bastantes detalles.

Primero os pongo la ruta en el google maps.

https://goo.gl/maps/1GErn

La ruta parte de Velada, el asfalto en todo momento va a ser bueno, es una carretera nacional. El comienzo no hace presagiar lo que nos vamos a encontrar: una recta interminable donde podremos poner el coche a tope, si pegasus lo permite claro. La visibilidad es excelente, y hay algún cambio de rasante suave, que nos permite ir confiados si no vemos tráfico por delante. Es conveniente empezaar a frenar nada más pasar el puente sobre el río Guadyerbas, pues ahí se acaban las rectas, y empieza una sucesión de curvas traicioneras, que parecen más abiertas de lo que realmente son, y el coche balanceará demasiado, porque algunas están más peraltadas.

En el kilómetro 92, hay un cruce a la izquierda que va a Parrilas. Ojo con el cruce, que está nada más salir de una curva y hay muy poca visibilidad. Merece la pena hacer ese tramo, donde la carretera ya no es tan ancha, pero va adaptándose a la orografía y se presta a una conducción alegre. Volvemos sobre nuestros pasos, y nos ponemos de nuevo en la nacional. Los próximos cuatro kilómetros son una sucesión de rectas cortas junto con las curvas medias que parece que se pueden tomar a más velocidad de lo que realmente se debe, y te invitan a retarte a cada pasada. Un cuesta abajo de más de un kilómetro marca el límite entre Toledo y Avila, y también la finca Valdeolivas (si, la famosa de Jesús Gil) pero ojo, al final de la misma hay una puente con una curva complicada de realizar: abre un poco a derecha al final del puente para cojer un repecho con una curva cerrada a izquierdas en el cruce de la carretera a Hontanar... (esta curva es más divertida cogerla a la vuelta). Pasado este tramo, vamos a tener un descanso hasta Ramacastañas en forma de recta, pero procura no salirte, que a los márgenes suele haber grandes charcos de agua si ha llovido copiosamente. Al llegar a Ramacastañas, una querida rotonda nos recuerda que no estamos en un circuito.

Ramacastañas tiene como principal atractivo las cuevas del valle, que os recomiendo que veais, y el paso del río del mismo nombre. Salimos del pueblo en dirección Monbletrán, y de primeras nos encontramos con una cuesta arriba más pronunciada de lo que parece, que requerirá apurar bien las marchas. Al final de la cuesta, la carretera deja de seguir la rectitud deseada y vereis que empieza a vordear pequeños salientes del campo, sin necesidad aparente: empezamos a encontrarnon los primeros vestigios de la calzada romana, lo que obliga a estos "rodeos" con curvas tan cerradas que no podremos dar a más de 70. Antes de terminar este tramo, nos aparece un desvío a "playas blancas", un lugar ideal para una comida campestre. Poco más hasta llega a Monbeltrán, que nos recibirá con su castillo y su plaza. De ahora en adelante, la carretera será un continuo subir.

A la salida de Monbeltrán hay una curva a izquierdas donde se pone desde siempre una familia a vender productos de la zona, recomiendo las cerezas. La carretera ya va enlazando curvas, y se empiezan a ver chorros de agua si es la época adecuada. Lamentablemente, a partir de esta zona se ven los efectos del devastador incendio que hubo hace tres años. En nada llegamos a Cuevas del Valle, donde comienza lo mejor de la ruta. Cuevas del valle debe de ser uno de los pueblos con más desnivel de España, porque está en medio de la subida y nos tiene reservadas dos curvas de 180º en plena travesía. A partir de aquí, hasta la cima, está muy bien conservabada tanto la calzada romana que os he comentado como la cabra hispánica, por lo que no es difícil que os la encontreis... pensad que estamos de visita, y para ellas es su hogar.

Encaramos ya la zona más fuerte del puerto, donde jugaremos con la subida y con autenticas paelleras de más de 180º, como la de el cruce con la carretera a El Arenal, que para mí es la mejor curva de todo el puerto. atravesaremos varias veces la calzada romana, y tendremos curvas de más de 90 grados que nos pondrán a prueba. en 7 kilómetros estaremos en el puerto del pico, podremos parar, ver las impresionantes vistas de la calzada romana, pasear por ella, mirar algún coche accidentado que lleva allí más de treinta años despeñado, pasear por la ladera, y con un poco de suerte, si es el día adecuado, ver la trashumancia. Recomiendo encarecidamente los postres del restaurante que hay allí, que además, no es caro.