Seat exeo | Zaragoza | 6.175
El sistema start/stop desarrollado por Bosch ya está instalado en más de un millón y medio de vehículos desde que comenzara su fabricación en 2007. Esta tecnología permite una reducción significativa del consumo y las emisiones del automóvil pero, ¿cómo funciona exactamente? Los ingenieros de la marca tecnológica Bosch tuvieron una idea para mejorar la relación de los coches con el medio ambiente: conseguir que el motor se apague cuando no se está utilizando su potencia, cuando está al ralentí. De este modo se conseguiría una reducción en el consumo y por tanto en las emisiones de CO2 de hasta un 8 por ciento en su uso urbano. Para ello la tecnología start/stop se compone de un motor de arranque, un módulo de control del motor con un coordinador start/stop integrado y un sensor que calcula el estado de la batería. Gracias a estos componentes, cuando el coche se detiene por cualquier razón, el motor se para y ahorra combustible. A la hora de reanudar la marcha, el conductor simplemente tiene que pisar el embrague y la tecnología vuelve a arrancar el motor. Durante el tiempo que el motor está apagado los dispositivos eléctricos del vehículo siguen recibiendo energía. Para evitar el agotamiento de la batería, el propio sistema start/stop gracias a un sensor integrado, controla el estado actual y futuro de la misma. Los componentes del sistema start/stop son de un tamaño reducido, que permite su integración en prácticamente todos los vehículos. Ahí radica su tremendo éxito en un mercado, el automovilístico, con una tendencia hacia la reducción del gasto de combustible y el ecologismo cada vez más evidente.