Seat exeo st | Vizcaya | 9.519
Automovilistas Europeos Asociados (AEA) considera que "es hora de evaluar y auditar las infraestructuras de la red de carreteras secundarias", donde ocurren la mayoría de los accidentes mortales de tráfico, que más que a exceso de velocidad se deben a adelantamientos y a salidas de los vehículos de la vía.
Así lo declaró a Servimedia Mario Arnaldo, presidente de AEA, tras conocer que el pasado fin de semana fue uno de los más trágicos de los últimos meses en la carretera, donde un total de 23 accidentes dejaron 28 muertos y 31 heridos.
Sin embargo, este hecho debe analizarse "con prudencia" en opinión de Arnaldo, quien apostó por evaluar los datos dentro de un periodo para entender mejor la tendencia del momento y no sólo lo ocurrido en un fin de semana.
A su parecer, si algo puede deducirse con claridad de la siniestralidad del fin de semana pasado es que no está relacionada en modo alguno con el aumento de 110 a 120 kilómetros por hora, ya que la mayor parte de los accidentes se produjeron en carreteras secundarias, donde este límite no se aplica.
Es más, argumentó el presidente de AEA, entre marzo y mayo de este año, cuando sí estaba en vigor el límite de 110, se redujo menos el número de víctimas mortales en las carreteras españolas que en el mismo periodo del año pasado. Así, detalló, si en los meses de marzo, abril y mayo de 2010 los fallecidos fueron 79 menos que en las mismas fechas de 2009, en 2011 el descenso de muertos se situó en 41.
Y es que, insistió Arnaldo, la mayoría de los accidentes mortales se producen por adelantamientos y salidas de la vía en carreteras secundarias y no por exceso de velocidad, lo que evidencia que "es hora" de revisar las infraestructuras de esta red, como se ha hecho con la de carreteras principales.
Quien asocie límite de velocidad con muertos "está tratando de desviar la atención de los verdaderos problemas relacionados con la seguridad vial en España", apostilló el presidente de Automovilistas Europeos Asociados, que alertó también sobre la necesidad de analizar y controlar el factor alcohol a la hora de hacer balance de la siniestralidad al volante.