MADRID-Hoy se hace balance de la «operación verano 2011» que, gracias al regreso escalonado, no ha sido especialmente trágica en el número de accidentes; sin embargo, los atropellos se han producido casi a diario: treinta peatones y una decena de ciclistas han fallecido durante julio y agosto en carreteras. Galicia ha sido la autonomía más castigada, aunque las 17 han registrado este tipo de accidentes a lo largo de todo el verano. ¿Por qué? La memoria del IV Congreso Internacional de Prevención de los Comportamientos Viales de Riesgo (Precovir) apunta al alcohol ingerido por los viandantes como una de las principales causas de los atropellos (el 24 por ciento). Además, añade que el 55 por ciento de los peatones estaban cometiendo alguna infracción en el momento del accidente. Pero, como apunta María Eugenia Doménech, presidenta de la Asociación de Afectados de Accidentes de Tráfico, muchas de estas faltas se producen porque «la protección de las vías sólo están diseñadas para los vehículos de cuatro ruedas». Y pone varios ejemplos: paradas de autobuses interurbanos de difícil acceso para los peatones, mala protección de las estaciones de cercanías en núcleos urbanos o carreteras imposibles de cruzar. Ante estas dificultades, Tráfico ha tomado pocas medidas.
«El programa de acción de seguridad vial 2011-2020» que ha elaborado la Unión Europea (UE), a diferencia del español, es ambicioso. Busca reducir a la mitad las vítimas de accidentes de tráfico y, para conseguirlo, se centra en tres aspectos: mejorar la seguridad de los vehículos y de las infraestructuras, así como insistir en el buen comportamiento de los peatones. En la UE se produce cada año más de 7.500 atropellos mortales. «El 70 por ciento se producen en vías urbanas, y en su mayoría se trata de menores de 10 años o de adultos de más de 65», explica Mario Arnaldo, presidente de Automovilistas Europeos Asociados. En España, durante 2009 –los últimos datos de la DGT– se contabilizaron 502 peatones fallecidos. El 53 por ciento de estos siniestros se produjeron en vías urbanas. Doménech apunta a una causa: «A pesar de los esfuerzos, fallamos en el diseño de las infraestructuras.
Se olvidan de los peatones».
Desde la Dirección General de Tráfico tiran balones fuera: aseguran que la mayor parte de los atropellos se producen en zona urbana y que, por tanto, están fuera de su competencia. No obstante, reconocen que también han aumentado en las carreteras. «El atropello es el accidente típico de ciudad», explica Paco Altozano, portavoz de la DGT. Lo mismo ocurre con los ciclistas: también sufren más accidentes en las urbes. No obstante, algunos de los últimos siniestros más graves se han producido en vías interurbanas. Es el caso de los tres miembros de la misma familia, fallecidos el pasado fin de semana en La Coruña cuando se dirigían a una romería, y de una mujer, que también caminaba por una carretera junto a dos amigas en la provincia de Toledo. Estos casos demuestran, para Altozano, que «pasear por las carreteras no es sano». Aunque no es el accidente más común. «Se registran bastantes atropellos cuando el conductor se baja del vehículo, por cualquier avería, y es arrollado», explica. Así lo demuestra el hecho de que cuatro de cada diez atropellos fuera de ciudad se produzcan en autopistas y autovías. Estos colectivos «son los más vulnerables», admite.
Sin iniciativas
Sobre la falta de campañas específicas dirigidas a bajar esta siniestralidad, el portavoz de la DGT asegura que «en el nuevo Plan Estratégico 2011-2020 se contemplan actuaciones concretas. Hasta ahora hemos ido a lo más básico: la velocidad, el cinturón, el alcohol...» En suma, aspectos concretos sobre los que se puede sancionar, algo que es más difícil si al que se tiene que vigilar es al peatón, no al conductor. Sobre las «medidas concretas» a las que se refiere, éstas pasan por crear «zonas 30» en las ciudades. De acuerdo con Tráfico, si se circula a 50 kilómetros por hora la probabilidad de que un peatón atropellado muera es del 50 por ciento. A 30, es de un tercio. Esta disminución es otra de las reivindicaciones que llevan años exigiendo las asociaciones ciclistas. El número de ciudadanos que utilizan la bicicleta en las urbes aumenta cada año, como demuestran las más de 100 ciudades españolas que cuentan con servicios públicos de préstamo. Su siniestralidad también se ha incrementado.
SINIESTROS
Los picos del verano
Los accidentes de Tráfico no han copado la información este verano, ya que su número no ha sido muy elevado. No obstante, en fechas sensibles como el comienzo o el final de las vacaciones han generado picos de siniestralidad. El último día de agosto se produjo uno de los incidentes más graves –como refleja la imagen– en el que murieron tres personas en un municipio sevillano
Fuente>>> https://www.larazon.es/noticia/7298-peatones-los-mas-debiles-de-la-carretera