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1. Sensores de estacionamiento: Si alguno de los sensores está sucio, obstruido o defectuoso, podría causar un mal funcionamiento en el sistema. Revisar y limpiar los sensores puede ser un buen primer paso.

2. Conexiones eléctricas: Un cable o conector dañado o suelto podría ser la causa. Es importante revisar todas las conexiones eléctricas asociadas con el sistema de ayuda de estacionamiento.

3. Módulo de control: El módulo de control de la ayuda de estacionamiento podría estar fallando. A menudo se necesita equipo de diagnóstico especial para verificar esto.

4. Fusibles: Siempre es bueno revisar si un fusible relacionado con el sistema de ayuda al estacionamiento se ha quemado.

5. Programación de la ECU: En algunos casos, puede haber un error de software o la necesidad de una reprogramación de la unidad de control electrónico del vehículo.

6. Diagnóstico Profesional: Si los pasos anteriores no identifican o resuelven el problema, sería recomendable que tu compañero lleve el coche a un taller especializado donde puedan realizar un diagnóstico más profundo con herramientas adecuadas, como un escáner OBD-II, que puede leer los códigos de error específicos del sistema de ayuda de estacionamiento.

Es importante recordar que trabajar en sistemas eléctricos de automóviles puede ser complicado y, si no se tiene experiencia, es mejor dejarlo en manos de profesionales para evitar daños adicionales.