Seat exeo st | Vizcaya | 9.519
Gran novedad 2012 de la casa francesa
Tito Maruy, asesor automotor
Antes de que sea presentado en sociedad, tuvimos la oportunidad de probar el nuevo Citroën C4 Hatchback. Esta es la segunda generación del modelo que se inició en el 2004.
A primera vista, ha cambiado bastante: ha aumentado de tamaño a 4,26 m de largo, 1,77 de ancho y 1,46 de alto, lo que resulta en un auto más cómodo en el interior, sin afectar la maniobrabilidad. Tiene un aire más agresivo y robusto; contribuyen a ello los faros del tipo "ojo de halcón", las nervaduras del capot y la trabajada estética global, con una marcada línea de cintura que acaba en el rabillo del faro posterior.
Si por fuera es llamativo, la cosa por dentro es mejor aún: la ergonomía es notable, cambiando el antiguo tablero de instrumentos central por uno envolvente hacia el piloto, realizado en material blando, con un nivel de calidad y detalles que ya quisieran tener algunos autos de segmentos mayores. Muy buen acabado en la tapicería y plásticos, con muchos espacios para las cosas y siempre a la mano. Acomodarse no es problema con la cantidad de regulaciones del asiento del conductor y del timón. Los asientos tienen buena sujeción lateral y el del copiloto tiene regulación de altura también.
Para los pasajeros de atrás el área es reducida, pero el suave declive del techo proporciona el espacio suficiente para que la cabeza no choque contra el techo; sin embargo, dos adultos se pueden acomodar bastante bien. La maletera es grande, y eso en un hatchback es un éxito. Lo que también nos llamó la atención es la profundidad de la guantera y el tablero de instrumentos digital bastante completo. Múltiples controles en el timón y un buen equipo de audio con 6 parlantes.
Probamos dos de las versiones que se van a comercializar, ambas con el motor 1,6 litros de 120 HP de potencia, aro 16", 4 puertas, una con la caja mecánica y la otra automática.
La sensación en ambos modelos es la misma. Una gran maniobrabilidad y capacidad de frenaje. Los frenos de disco en las 4 ruedas, quizás algo agresivos al tacto, obligan a modular bastante la presión en el pedal, pero nada a lo que uno no se acostumbre. La dirección asistida electrónicamente es algo suave, incluso a alta velocidad. La suspensión es agradable en la ciudad, absorbe bien las irregularidades del piso. Girando a velocidad se siente algo blanda pero nada como para perder el control.
Probar el C4 en el autódromo La Chutana te permite buscarle los límites al producto con toda seguridad y, la verdad, los controles de tracción, frenaje y estabilidad hacen de este auto muy controlable. La caja automática de pasaje es muy suave, casi imperceptible, claro que es más alegre cuando se usa la opción secuencial. La mecánica es cumplidora. No es un deportivo por excelencia, ni sus prestaciones van por ahí, culpa de los 1.700 kilos de peso y el pequeño 1,6 litros, pero es un producto bien pensado.
Ficha técnica
Cilindrada: 1.590 cc.
Moto: Inyección electrónica multipunto.
Transmisión: Manual 5 velocidades o automática secuencial de 4 velocidades.
Potencia máx.: 120 Cv
Torque: 160 Nm/4.250 rpm.
Velocidad máx.: 180 km/h.
Neumáticos: Aros de aleación de 16”.
Equipamiento: Techo panorámico, sensores de estacionamiento, sensor de lluvia.
Precio base: US$ 23.500
